Guía para hacer un viaje a Malta en cuatro días

Consejos para viajar a Malta en cuatro días, tiempo suficiente para conocer los encantos de una de las islas más sorprendentes del Mediterráneo

Después de conocer algunas de las más espectaculares islas del Mediterráneo como Sicilia, Cerdeña, Formentera o Menorca, parece que ya nada puede sorprender en el Mare Nostrum, pero nada más lejos de la realidad. Aún queda mucho por descubrir.  En esa lista de destinos pendientes teníamos colocada desde hace tiempo la isla de Malta. Aunque lo correcto es decir las tres islas que componen este país, ya que, además de Malta, no hay que olvidar la espectacular Gozo y la pequeña Comino.

Consejos y recomendaciones para preparar un viaje a Malta en cuatro días

Decidimos escaparnos al país más pequeño de la Unión Europea a mediados del mes de octubre, un momento ideal para disfrutar de sus encantos. Se trata de una época del año en la que las temperaturas siguen siendo veraniegas (entre 28 y 30 grados de máxima) pero la cantidad de turistas que viaja hasta allí se reduce sensiblemente. Ni mucho menos estaba desolada y carente ambiente, por lo que no me quiero imaginar el hervidero de personas en el que se puede convertir en pleno verano. Se puede decir que tenía la ocupación justa para estar cómodo sin sufrir ningún tipo de agobio.

Malta se ha erigido como destino preferente para muchos jóvenes a la hora de aprender inglés, especialmente porque algunas zonas de la isla cuentan con un gran ambiente nocturno. Tengo que decir que el inglés que se habla en Malta no es muy diferente al de un español, portugués o francés que ha aprendido este idioma. Es decir, para los que no tenemos unos grandes conocimientos de esta lengua lo entendemos todo perfectamente. Por este motivo pongo bastante en duda que el aprendizaje en Malta sea mejor que el que se obtiene viajando a Inglaterra, Irlanda o Estados Unidos, por poner tres ejemplos.

¿En cuántos días se ve Malta?

En nuestro caso optamos por organizar un viaje de cuatro días en Malta. Pueden parecer pocos, pero hay que tener en cuenta que la isla principal tiene solo 246 kilómetros cuadrados y las otras dos, Gozo y Comino, se pueden ver perfectamente en un día. Para conocer lo más interesante de este país con cuatro días es suficiente, aunque si se acude para descansar y tomarse todo con más calma, no está mal permanecer durante una semana.

Vuelos a Malta

Pero vamos a empezar desde el principio. Para viajar a Malta se puede hacer cómodamente a través de las conexiones que Ryanair tiene con la isla. Los precios suelen ser bastante ajustados siempre que se reserve con antelación. Recomiendo alquilar un vehículo. Es cierto que Malta posee una espectacular red de autobuses públicos que llegan a todos los rincones, incluso a los más recónditos. Por ello los que no tengan carné o les dé un poco de miedo conducir por la izquierda tienen la tranquilidad de contar con el transporte público, aunque obviamente perderán más tiempo entre esperas y trayectos.

Alquilar coche y conducir por la izquierda

El mayor hándicap a la hora de alquilar coche es acostumbrarse a conducir por la izquierda. Esta costumbre anglosajona permanece muy arraigada en el país ante la indignación de muchos turistas. En mi caso no era la primera vez que conducía así porque ya lo hice en Australia, aunque en aquella ocasión fue un vehículo automático lo que facilitaba mucho la labor. Y es que la tarea de cambiar de marcha con la mano izquierda es sin duda lo peor de todo. Como consejo, es buena idea que el copiloto meta las marchas con su mano derecha y el piloto pise el embrague. Una conducción conjunta que ayuda mucho al que está al volante, que además debe estar pendiente de coger las rotondas por la izquierda.

La red de carreteras de Malta deja mucho que desear. Está compuesta por pequeñas vías, muchas de ellas con un firme en muy mal estado y con mucho tráfico. Si en octubre estaban bastante colapsadas no me quiero ni imaginar lo que sucederá en temporada alta. Para ello es mejor optar por un vehículo pequeño (en nuestro caso alquilamos un Peugeot 107).

Son muchas las empresas de alquiler de vehículos que hay en Malta, pero algunas llevan a cabo una práctica inmoral que no habíamos visto en ningún otro sitio. Al margen del precio del propio alquiler, a la hora de coger el coche te cobran por entregártelo lleno de gasolina. En el resto de empresas de “rent a car” lo que hay que hacer es devolver el auto con el mismo nivel de combustible que te lo dieron. Es decir, pagas la gasolina que gastas. Algunas empresas de Malta te cobran alrededor de 30 euros por dártelo con el depósito lleno y devolverlo de la misma manera y 60 si lo entregas con el tanque a la mitad. A esto hay que sumarle los 20 euros que cualquier turista se puede gastar en gasolina después de recorrer la isla en cuatro días. Se trata de un dato a tener en cuenta que, por experiencia propia, practica la compañía Active Car Rental. Además, el trato recibido fue pésimo y a la hora de entregarlo en el aeropuerto de Malta no teníamos ni sitio para dejarlo. Junto con Avis, otra empresa que ponemos en la “lista negra”.

Hoteles en Malta

A la hora de reservar el hotel, recomiendo alejarse de zonas más turísticas y de ocio nocturno en el caso de que se vaya a viajar a Malta en temporada alta. Estas ciudades más masificadas son San Julián y Sliema. Son las que cuentan con el mayor número de discotecas, bares y hoteles. En nuestro caso, como fuimos en octubre, nos decantamos por el enclave de Paceville en San Julián que, aunque tenía ambiente, no estaba ni mucho menos saturado. Elegimos el hotel Golden Tulip Vivaldi, bastante correcto con habitaciones amplias y desayuno pasable.

Itinerario con todo lo que hacer en Malta en 4 días

A la hora de planifica el itinerario hay que dividirse la isla por zonas aunque, como las distancias son tan pequeñas, no se pierde demasiado tiempo en carretera. Basta con decir que de una punta a otra de la isla hay 34 kilómetros que se tardan en recorrer algo menos que una hora. Nosotros realizamos el siguiente itinerario de Malta en cuatro días.

• Día 1: Visita a La Valeta y a dos de Las Tres Ciudades, Senglea y Vittoriosa
• Día 2: Marsaxlokk, Blue Grotto (Gruta Azul), templos de Hagar Qim, playas de Golden Bay y Ghajn Tuffieha, Mdina y Rabat, Sliema de noche.
• Día 3: Isla de Gozo (Victoria, Azure Window, Santuario de Ta ‘Pinu), isla de Comino (Blue Lagoon), San Niklaw Bay, Spinola Bay en San Julián.
• Día 4: Vista de La Valeta desde Sliema, St. Peter’s Pool, comer pescado en Marsaxlokk, Golden Bay, Mosta, Naxxar.

En este itinerario están prácticamente todos los puntos de interés de las tres islas que componen Malta, aunque siempre hay algún rincón oculto que se puede descubrir si se dispone de más tiempo.

Si hubiera que resumir en pocas palabas lo que el viajero se va a encontrar en Malta diría que disfrutará con un vasto patrimonio histórico en el que destacan iglesias de una belleza extraordinaria. También se topará con maravillas de la naturaleza esculpidas en los acantilados que rodean las islas como Blue Grotto, St. Peter’s Pool, Azure Window y el Blue Lagoon. Asimismo, el que vaya en busca de playas que sepa que Malta no es el lugar indicado ya que apenas se pueden contar con los dedos de una mano.

¿Es caro Malta?

El coste de la vida en Malta es muy similar al de España. Las entradas a monumentos, comida, regalos y gasolina tienen unos precios razonables. En cuanto a la gastronomía, este pequeño país no se caracteriza por tener unos platos propios de relevancia. La influencia italiana es muy palpable y son muchos los restaurantes y tratorías en los que degustar una buena pasta y pizza. De hecho en algunos sitios comimos mejores pizzas que, por ejemplo, en Venecia y Florencia. En la visita al pequeño y precioso pueblo pesquero de Marsaxlokk recomiendo comer en alguno de los restaurantes que están junto al puerto y que ofrecen pescado fresco del día a precios muy razonables. Nosotros degustamos una exquisita lubina.

Otros consejos para viajar a Malta

Una recomendación muy importante es estar alerta ante los mosquitos. Aún en octubre había muchísimos ya que las temperaturas seguían siendo elevadas. Aconsejo llevar un buen repelente, ya que en nuestro caso no lo hicimos y sufrimos más picaduras que en Costa Rica. Especialmente son bastante activos cuando uno está tranquilamente cenando o tomando una copa en una terraza. Muy al loro con este tema.

Malta es un país que por un lado es muy conservador y puritano, mientras que por otro es uno de los destinos de fiesta y juerga más demandados de Europa. La tradición católica de Malta está muy arraigada y eso se ve en que cada pueblo, por muy pequeño que sea, cuenta con iglesias que bien podrían ser catedrales. Muchas de ellas son dignas de visita, aunque las mujeres deben entrar con falda hasta los tobillos y con los brazos también cubiertos y sin escotes. Para ello a la entrada se suelen proporcionar chales para que todo quede bien tapadito. Este puritanismo también se refleja en las playas donde está prohibido el toples. Sin embargo en las ciudades con más ambiente nocturno hay bastante desmadre.

Hay que decir que es un país muy seguro. En ningún momento tuvimos ninguna sensación incómoda en este aspecto. Es curioso que a pesar de la gran cantidad de iglesias que hay en Malta, en ninguna de ellas se colocan mendigos pidiendo.

Esos son en líneas generales los consejos que doy a la hora de planificar un viaje a Malta, un país que tenemos justo al lado y que bien merece una visita aunque sea de cuatro días. Sorprenderá a buen seguro y dejará un grato recuerdo.