Una de las mayores delicias que ofrece la costa de Portugal es su gastronomía. Cierto es que en cualquier pueblicito del interior se puede degustar un bacalao a brás de muerte como hemos demostrado en Foios o Vilar Formoso, pero las ciudades costeras, como ocurre en todo el mundo, tienen la ventaja de contar con productos frescos del mar de una calidad extraordinaria. Aveiro (véase el post de visitar Aveiro), a donde acudimos cada verano por su cercanía con Salamanca, es un buen ejemplo de ello, pero un poco más al norte, en Espinho, el panorama no es menos atractivo.
Al tratarse de una ciudad muy turística durante el verano que además recibe visitantes todo el año por la presencia de su casino y para practicar surf en su kilométrica playa, los restaurantes en Espinho son muchos y variados. Algunos de ellos están localizados en el paseo marítimo, donde disponen de amplias terrazas con vistas al océano que convierten la cena de una noche de verano en una experiencia única. Eso si el fuerte viento que azota en esta zona no lo impide.
Dos restaurantes para comer en Espinho barato y con calidad
Además de realizar el apasionante paseo que, a través de una pasarela de madera en la playa, une Espinho con Vila Nova de Gaia, en nuestro viaje de dos días a esta ciudad disfrutamos de la gastronomía lusa en dos restaurantes en Espinho. Por un lado nos adentramos en la cocina más tradicional de la mano de Kurika y, por otro, catamos uno de los excelentes arroces de marisco caldosos que se hacen en la zona en el restaurante Os Melinhos. Ambas experiencias fueron muy gratas.
Restaurante Kurika (Rua 64, número 350. Espinho)
Kurika es uno de los restaurantes en Espinho que mejor representa el concepto de la cocina tradicional portuguesa, tanto en el fondo como en la formas. Un pequeño luminoso de la marca de cafés Delta anuncia la presencia de este local pequeño, acogedor y con un propietario que se desvive para que el comensal esté lo más a gusto posible. La carta no es demasiado amplia, pero va cambiando cada día en función de los productos de los que dispone.
Kurika está a cinco minutos caminando del Casino de Espinho, en la rua 64 (en Espinho las calles están nombradas con números, al estilo Nueva York). Apenas siete mesas caben en un restaurante muy auténtico en donde se come bien y barato. En nuestro caso nos decantamos como entrada por unos bolinhos de bacalao, una especie de croquetas o buñuelos de bacalao típicos de Portugal que recién hechos están deliciosos.
El pescado más común en el país luso también estuvo presente posteriormente con un plato de bacalao a lagareiro (a la brasa con una base de aceite de oliva, patatas y pimientos) (11,50€). Es una de las formas de prepararlo que más nos gustan junto al realizado con natas y a brás.
También nos decantamos por unas lulas na brasa (chipirones a la brasa) (9€), que estaban correctas. Con estos dos platos, más el entrante y un postre, dos persona quedan más que satisfechas.
Otras de las exquisiteces que el restaurante Kurika ofrece son la dorada a la brasa (8€), arroz con gambas (12,50€), solomillo de ternera con setas (9€), entrecot a la brasa (7€) y una parrillada de varias carnes (8,50€). Todos estos precios corresponden a las medias raciones, que son para entendernos un plato para una persona. Pero también existe la posibilidad de pedir una ración completa que sería para dos.
En cuanto a los postres destacamos la tarta casera de almendras y uno de los preparados más deliciosos que hacen en Portugal, las natas do ceu (base de galletas, yema de huevo, nata y azúcar).
💰 Precio por persona: 18 euros aproximadamente
Restaurante Os Melinhos (Rua 2, número 1269. Espinho)
Espinho tiene la suerte de contar con muy buen pescado fresco. Se trata de una ciudad en la que muchas personas se dedican a la pesca y eso tiene su reflejo en los restaurantes en Espinho. Algo parecido ocurre con la cercana localidad de Furadouro, donde disfrutamos también de las excelencias que da el Océano Atlántico.
El restaurante Os Melinhos, ubicado en el mismo paseo marítimo es un buen lugar para degustar el pescado fresco. Su imponente vitrina con las piezas del día demuestra bien a las claras que los productos del mar son protagonistas. Pero nosotros nos dejamos seducir por otro de los platos que elaboran magistralmente en Portugal: el arroz caldoso. En este caso pedimos uno de rape con langostinos cuya cazuela para dos personas tiene un precio de 29€.
Hay que reconocer que el mejor arroz caldoso que hemos probado fue el de marisco del restaurante Uma de Lisboa, pero el de Os Melinhos tenía una calidad sublime. La razón es la abundante cantidad de tropezones que presentaba: hermosos langostinos y un sinfín de pedazos de rape de una excelente calidad. Muchos comensales nos quejamos de que en algunos restaurantes los tropezones brillan por su ausencia en los arroces, pero en este caso ocurrió todo lo contrario. Destacamos especialmente el rape, fresco, tierno y sin espinas. Un placer gastronómico.
Rematamos con unas natas do ceu, que también en el restaurante Os Melinhos están exquisitas.
Los que no se sientan demasiados seducidos por el arroz, este establecimiento posee una variada carta con pescados frescos como merluza, lenguado y sardinas a la parrilla, dorada y otras piezas que tengan en el día. También ofrecen mariscos como percebes y bogavante, además de los típicos platos de carne de la zona. En cuanto a los arroces, además del reseñado de rape y langostinos elaboran otro de marisco (32€ para dos personas).
Como nuestro viaje a Espinho se produjo en invierno tuvimos que cenar en el interior del establecimiento (suele estar lleno de los fines de semana en cualquier momento del año), pero para los meses de verano dispone de una terraza con vistas al Atlántico.
💰 Precio por persona: 22 euros aproximadamente
