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La isla de Mallorca es uno de los destinos más atractivos de España para los que busquen calas y playas cristalinas, pueblos con encanto, mucho ambiente, y unos parajes naturales cautivadores. Hay muchas formas de recorrer la isla balear, pero explorar Mallorca en barco es sin duda una de las más originales y atractivas. Te contamos cómo hacerlo
Mallorca tiene múltiples caras. Una para cada tipo de viajero. Por eso es una isla que cautiva sin discusión. Es turística, no cabe duda. Muy turística. Especialmente en unos meses de verano donde sus enclaves más representativos son conquistados por decenas de visitantes de todas las nacionalidades. Magalluf, El Arenal, Soller, playa de Palma… Es la cara más popular de Mallorca, la que incluso puede provocar rechazo si en temporada alta vamos buscando cierta tranquilidad. Sin embargo la isla balear es mucho más. Lo descubrimos cuando la visitamos un mes de octubre y nos perdimos por la sierra de Tramontana y por algunas de sus calas más desconocidas. Al igual que sucede en Ibiza, Mallorca sigue guardando pequeños tesoros secretos que se mantienen al margen de las masificaciones en cualquier momento del año. Eso sí, existe una forma muy original y atractiva de llegar a esos rincones desconocidos y zambullirse en solitario en las aguas más paradisiacas que hayamos visto. Explorar Mallorca en barco es un lujo más asequible de lo que se puede pensar.
Mallorca en barco, un capricho alcanzable
Cuando acudimos a una cala paradisiaca y totalmente virgen en islas como Mallorca, Ibiza, Menorca o Formentera después de haber realizado una caminata bajo el sol, da cierta envidia sana ver que un barco ha llegado hasta ella con total facilidad y con la comodidad que supone tener un lugar en el que descansar a la sombra tomándose un refrigerio. No solo eso, resulta todavía más tentador saber que existen pequeñas calas en las que ni tan siquiera es posible llegar caminando. Donde solo se puede acceder por mar en un pequeño barco o en un kayak.
Teniendo en cuenta todo esto, una posibilidad que al menos hay que estudiar y tener en cuenta es la de explorar Mallorca en barco. Aunque solo sea durante alguno de los días de la estancia en la isla. Alquilar barcos en Mallorca en sencillo y más accesible de lo que podemos pensar en un principio. Existen opciones con o sin patrón y por precios que van desde los 139 euros al día para seis personas o los 157 para diez, hasta los más de 300 si hablamos de embarcaciones más grandes y potentes. Estos barcos se pueden alquilar tanto por horas como por días.
Una pregunta muy común que se hacen muchas personas interesadas en este plan es si es necesaria la licencia para manejar una de estas embarcaciones. Existen ambas opciones. Alquilando un barco sin licencia en Mallorca nos encontraremos con uno más pequeño y manejable, pero con el que podremos realizar los mismos atractivos planes de visitar las calas más desconocidas y escondidas de la isla balear. Los propietarios de algunos de estos barcos proporcionan además cumplida información de los lugares más interesantes que visitar en la zona y en algunos casos incluyen gafas de buceo para hacer esnórquel y una nevera portátil para guardar las bebidas y la comida.
Las calas de Mallorca más escondidas para visitar en barco
La isla de Mallorca es rica en playas y calas paradisiacas. Una de nuestras favoritas es la de Illetes, muy accesible y popular. Sin embargo, hay otras que permiten disfrutar de un agradable día casi en solitario aunque sea temporada alta. La mejores sin dudas son las que solo tienen acceso por mar, de ahí la importancia y el atractivo de alquilar un barco. Estas son algunas de ellas.
Cala Marmots
Conocida como bahía de mármol, es una pequeña cala situada en la costa sureste, a unos minutos de la población de Caló des Moro. Cuenta con unos 45 metros de ancho y unos 30 metros de profundidad.
Las aguas cristalinas de color turquesa son idóneas para practicar esnórquel y buceo, con un fondo marino de ensueño. Al estar entre acantilados se encuentra protegida de los vientos
No dispone de servicios y suele estar visitada solamente por embarcaciones por su complicado acceso
Cala Beltrán
Es una pequeña cala virgen cerca de Cala Pi, en el municipio de Llucmajor en la costa sur. Cuenta con apenas 15 metros de ancho y unos 20 metros de profundidad.
Se trata de un espacio protegido dentro del Área Natural de Especial Interés (ANEI) por su biodiversidad natural. Es de difícil acceso por lo que la tranquilidad está asegurada. Cubierta de vegetación a ambos lados, con gran cantidad de rocas por lo que recomendamos que te lleves escarpines y un fondo marino ideal para buceo y esnórquel.
Es una cala completamente salvaje donde relajarse
Coll Baix
Es una hermosa cala que se localiza en Alcudia en la costa norte. Cuanta con 75 metros de ancho y aguas más profundas ideales para pequeñas embarcaciones.
También se encuentra protegida bajo la figura de Área Natural de Especial Interés. Es una playa de arena más gruesa de tonalidad gris oscuro y cantos rodados, de aguas cristalinas.
Si sois amantes de la naturaleza esta es vuestra playa. Es un remanso de paz ideal para desconectar en sus aguas rodeadas de paredes verticales de piedra.
Al tratarse de una cala bastante escondida no dispone de servicios y es los meses de verano algunos de los bañistas que acuden a la cala practican el nudismo.
Cala Virgili
Es una cala de piedras con fondo marino arenoso cerca de Cales de Mallorca en la costa este.
La longitud de la playa es de unos 25 metros y 20 metros de anchura. Está situada en una finca privada, con acceso a pie.
Rodeada de pequeños acantilados con fondo de cantos rodados y posidonia, y en la que nos encontramos la Cova de Ses Dones, que contiene agua y una pequeña playa en su interior.
La peculiaridad de esta cala es su forma de zigzag que hace el mar para adentrarse en la costa de forma irregular.
Llegados a este punto podemos disfrutar no solo de una, sino de hasta tres calas vírgenes más en las inmediaciones, que son cala Pilota, cala Bota y cala Magraner, todas ellas poco frecuentadas.
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