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Como amantes de la naturaleza y de los paisajes verdes decidimos viajar a un país que está empezando a hacerse un hueco como destino turístico pero que, afortunadamente para el visitante, no cuenta con masificaciones ni un alto número de turistas… aún.
Decidimos aprovechar una ruta por Eslovenia para conocer Croacia, pero eso da para otro post. Tenía que hacer esta anotación porque volamos desde Madrid a Zagreb aunque para acceder a Eslovenia hay más opciones como volar hasta Trieste.
Alquilamos un coche en el aeropuerto de Zagreb con dirección a Bled. Lo primero que hicimos fue comprar la “viñeta”, pegatina que tiene que estar visible en el coche para poder acceder a las autopistas eslovenas. Se compra en gasolineras, oficinas de correos y varios puntos más (cuesta 30 euros por una semana) La multa por viajar sin “viñeta” es muy alta, así que conviene comprarla en la primera gasolinera que encuentres.
Bled, primera parada de la ruta por Eslovenia
Bled es una ciudad salida de un cuento de hadas. Posee un lago alpino en el que está la única isla de toda Eslovenia, la isla de Bled. En ella se puede realizar un recorrido circular de cinco kilómetros y medio por un sendero peatonal. El tradicional transporte que te lleva por el lago hasta la isla es un bote llamado “pletna”.
Puedes disfrutar de la vista del lago desde el castillo, o bien desde una roca por un camino empinado que sale desde el mismo sendero circular alrededor del lago. La segunda opción nos pareció la mejor porque el castillo de Bled, excepto las vistas, no tiene mucho que ver y el coste de la entrada no es necesario pagarlo si vas hasta esta roca desde donde puedes disfrutar de la típica imagen de la ciudad eslovena.
Tras la visita a esta preciosa ciudad, seguimos nuestra ruta por Eslovenia y nos dirigimos al desfiladero Soteska Vintgar a 4 kilómetros de Bled. Tiene un recorrido de 2 kilómetros por una garganta impresionante con pasarelas de madera.
El Triglav, el “techo” de Eslovenia
Al finalizar el día nos desplazamos al maravilloso pueblo de Rateče, al pie de los Alpes Julianos, donde nos alojamos durante 3 días para explorar la montaña más alta de Eslovenia: el Triglav (2.864 metros).
El Parque Nacional del Triglav es uno de los parques nacionales más antiguos de Europa y el espacio protegido más grande de Eslovenia.
Es el paraíso de los senderistas y uno de los valles más bonitos de los Alpes Julianos. Tampoco puedes dejar de visitar el valle del río Soča de un color esmeralda maravilloso dónde se pueden practicar gran variedad de deportes acuáticos. Y no nos podemos olvidar de Kranjska Gora, lugar dónde tiene lugar la copa mundial de esquí alpino.
Postojna, su castillo y su inmensa cueva
Otra visita muy recomendable es esta ruta por Eslovenia es la cueva y el castillo de Postojna.
Postojna es el paraíso de las estalactitas, y comparar esta visita con la de cualquier otra cueva es imposible, ya que los 21 kilómetros de galerías la hacen la más grande de Europa.
La visita es guiada y al comprar las entradas nos informarán de los horarios disponibles. El itinerario está perfectamente organizado, cuenta con guía y dura unos 90 minutos. Parte de la visita se realiza en un divertido tren que nos adentrará en sus grutas y galerías. El resto, dónde se puede ver las partes más fascinantes de la cueva, se realiza a pie.
El castillo de Postojna está construido dentro de la boca de una cueva. En esloveno jama significa «cueva», por tanto su nombre quiere decir «castillo en una cueva». Se encuentra a unos nueve kilómetros de la ciudad de Postojna.
El castillo, de finales del siglo XVI, se encuentra en una ubicación espectacular, ante un precipicio de 123 metros. En la parte más alta de la cueva se encuentra una pequeña galería que presentaba una salida secreta y es la que la usó el caballero Erasmo Lueger durante el sitio del castillo para proveerse de alimentos. La leyenda de Erasmo de Predjama la podéis escuchar en las autoguías gratuitas y en español que os ofrecerán a la entrada.
Otras rutas en coche por Europa
Además de Eslovenia, hay otros países y rincones de Europa que se prestan a realizar apasionantes rutas en coche. Un ejemplo es Irlanda, donde conducir, aunque sea por la izquierda, es un auténtico placer. Lo describimos en el post de un viaje a Irlanda en una semana. Lo mismo ocurre en Malta y en la isla italiana de Sicilia, ambas con un exquisito aroma mediterráneo.
Ljubliana y Piran, el colofón de la ruta por Eslovenia
El siguiente paso fue visitar la capital: Ljubliana. Es una ciudad verde y precisamente estuvimos el año que obtuvo el título de Capital Verde Europea. Además del famoso castillo, hay que visitar los tres puentes que cruzan la ciudad, la Biblioteca Universitaria Nacional, el puente de los dragones… y se puede disfrutar de la gastronomía eslovena y música por sus calles, algo que me encanta y es tan habitual en ciudades europeas.
De camino hacia Croacia paramos en la ciudad costera de Piran. Es una ciudad medieval pintoresca bañada por el mediterráneo y con unas bonitas vistas. Su gran plaza y el castillo son sus principales atractivos.
Tengo que deciros que Eslovenia es un país del cual no conocía nada hasta que leí un reportaje y vi algunas fotografías. Después de visitarlo puedo asegurar que es uno de los países “más verdes” de Europa donde aún puedes disfrutar de sus paisajes y su naturaleza sin masificación.
Hola, me gustaría preguntarte cómo ves este viaje que describes para hacerlo con un niño de 6 años y otro de 2. Los recorridos en coche son muy largos? Esas rutas de las que habláis alguna de ellas son factibles para hacerlas con ellos ya sea con carro o con mochila para bebés? Muchas gracias.
Hola Laura. Precisamente ahora estamos haciendo un viaje por Eslovenia. Aún no te podemos informar mucho porque no hemos llegado a los lagos, pero por lo que vemos hay mucha gente que está viajando con niños muy pequeños. Es un país pequeño donde los recorridos en coche no son muy largos y hay rutas para todos los niveles. A cada uno de los sitios que describe el artículo se puede llegar en coche por lo tanto no hay muchísimo problema. Luego se pueden hacer las rutas senderistas que cada uno quiera. Si te parece cuando regresemos te podemos informar mucho más. Un saludo.
Pues eso estaría fenomenal, muchísimas gracias!!
Nos vamos para allá en Marzo 2020 y tenemos unas ganas enormes. Tiene una pintaza brutal el viaje 🙂
Es muy recomendable. Después de que Elena publicara este post en nuestro blog, viajamos a Eslovenia hace dos veranos. Así que si tenéis cualquier duda nos podéis consultar porque todavía no hemos subido post de aquel viaje. Un saludo y a disfrutar.