A sólo 9 kilómetros de Palma y con la opción de llegar tanto en vehículo como en transporte público, la playa de Illetes de Mallorca es una de las calas más accesibles de Baleares. Una concurrida zona de baño de aguas cristalinas, arena fina y rodeada de pinares
Normalmente cuando hablamos de calas o pequeñas playas de aguas cristalinas incrustadas entre acantilados, la palabra accesibilidad no suele estar muy presente. Un ejemplo son algunas de las mejores calas de Menorca, donde en ocasiones hay que recorrer varios kilómetros andando para sumergirse en el edén. Una bendita excepción es la playa de Illetes en Mallorca.
Cómo llegar a la playa de Illetes de Mallorca
También conocida como Illetas, se encuentra a sólo 9 kilómetros de Palma y es una de esas visitas imprescindibles cuando se pasan unos días en la isla balear.
Illetes pertenece al municipio de Calviá, pero se puede llegar desde Palma de la forma más cómoda posible: en transporte público. La línea de autobús número 3 Es Pont d’Inca-Illetes nos deja a tan sólo 300 metros caminando de la cala. Para ello hay que bajarse en la última parada, la del Passeig d´Illetes 57 (platja). El precio del trayecto, que dura unos 30 minutos, es de 1,5 euros. Además, la frecuencia de la línea es bastante elevada, ya que pasa un autobús cada diez minutos.
Para los que vayan en coche, existen numerosas plazas de aparcamiento de zona azul en las inmediaciones de la playa. Si se acude temprano no debería existir problema para estacionar el vehículo, aunque en las horas centrales del día las dificultades lógicamente aumentan.
¿Mallorca en invierno?
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Esta accesibilidad hace que la playa de Illetes de Mallorca esté normalmente bastante concurrida. Por lo tanto los que busquen tranquilidad, sí pueden visitarla en meses de menor turismo como mayo, junio o septiembre, pero en temporada alta se van a encontrar con una playa repleta de bañistas, especialmente familias con niños.
Un escenario idílico de aguas cristalinas para una de las mejores playas de Mallorca
La playa de Illetes se localiza en una agradable zona residencial salpicada de pequeñas playas y calas. El enclave se urbanizó a mediados del siglo XX con casas de verano típicamente mediterráneas, pequeños edificios de apartamentos y algunos hoteles. Todo ello en un entorno de gran belleza rodeado de pinares y con el azul intenso del Mediterráneo como telón de fondo.
Aunque popularmente se conoce como la playa de Illetas de Mallorca, en realidad esta joya de la cosa mallorquina está compuesta por tres pequeñas calas: Es Fortí, Cala Comtessa y la propia playa de Illetas. Su nombre, que curiosamente coincide con el de una de las mejores playas de Formentera, se debe a los islotes que se encuentran justo enfrente. Se trata de Sa Torre, S’Estenedor y Sa Caleta. Las tres calas que forman la playa de Illetas se encuentran protegidas por el acantilado y los pinares que las rodean formando un escenario muy tranquilo donde apenas sopla el viento.
La playa de Illetas tiene una longitud de 125 metros y unos 50 metros de ancha. Dispone de servicios de duchas, vestuario, tumbonas y sombrillas para alquilar. Además, posee en las inmediaciones varios restaurantes ‘chill out’ y un balneario, todos ellos con vistas espectaculares y un ambiente relajado. Sin duda unas perfectas atalayas para ver el atardecer de la forma más sosegada posible.
Pero otra de las bazas de la playa de Illetas de Mallorca son sus aguas cristalinas que, vistas desde la orilla, ofrecen un intenso azul turquesa. En esta zona el Mediterráneo tiene una temperatura idónea para sumergirse en él y disfrutar el baño y también del esnórquel. La arena además es blanca y fina para tumbarse y relajarse a tomar el sol, eso sí, siempre con la debida protección y precaución.
Illetes es una opción ideal para gozar de una cala paradisiaca, pero con la ventaja de encontrarse al lado de Palma y con una accesibilidad absoluta.
